Nos explicaremos. Fomento ha anunciado que suprimirá 48 líneas ferroviarias de media distancia de Renfe y que reducirá también un tercio de la oferta en las otras 127 líneas restantes. ¿Con qué finalidad? ahorrar 86,5 millones, aunque para ello deje a casi dos millones de pasajeros en tierra. Pero es que hay más. Adif ha anunciado recientemente que tiene previsto sacar a la venta 1.500 activos inmobiliarios de su patrimonio. De entre los que 400 son estaciones y el resto son terrenos o edificios. Con todo esto, no hace más que consolidar una tendencia de destrucción del servicio público, desatendiendo a millones de pasajeros (ver noticia). Eso sí, las líneas AVE y la alta velocidad siguen aglutinando gran parte de los esfuerzos en mejoras de infraestructuras y servicios. Es decir, fomentar unas líneas claramente deficitarias -en algunos casos es irrisoria la media de pasajeros- con unos precios exclusivos para las élites, mientras que los regionales "de toda la vida" se desmantelan, obligando a la población menos pudiente a utilizar otros medios más contaminantes y menos efectivos, ante la clara imposibilidad del uso del AVE como transporte diario de masas.
Por otra parte, esta vez afectando a las plantillas de trabajadores, el ministerio ha planteado un ERE tanto en Renfe como en Adif. Un expediente, del que si bien aún se desconocen las condiciones, preveen que afectará a más de mil empleos en Adif y casi los dos mil en Renfe. Añadiendo a este drama la descomposición de las empresas, dividiendo Adif en dos y Renfe en cuatro -siguiendo los consejos de la normativa europea, alegan desde el ministerio- (ver noticia). Porque claro, ellos nunca son responsables de nada. Se cerrarán servicios, se empeorará la calidad, se reducirán plantillas de forma dramática, y se seccionarán las empresas en diversas partes más vendibles, pero ellos no tienen nada que ver con el asunto. No, claro que no. Pero seguro que cuando haya algo de lo que enorgullecerse no tardarán en ser los primeros en ponerse medallas. Cuando puedan les explican a esas miles de familias que van a arrojar a la basura despojándolas de la única nómina que entra en sus casas o a los millones de personas que dejarán de usar el tren porque o bien les han subido las tarifas o directamente han eliminado el convoy.
[FUENTES: 20minutos.es / eldiario.es ]
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