miércoles, 2 de enero de 2013

SIN COMISIONES DE INVESTIGACIÓN NI COMPARECENCIAS EN EL CONGRESO

Hace como año y medio España parió una criatura llamada Bankia. Cuando nació sus acciones se cambiaban por 3,65 €, a día de hoy apenas valen 34 céntimos. Es más, hoy, en la primera sesión del año, Bankia no se ha dejado ver ni el flequillo por el parqué (ver noticia).
Y digo yo, menos mal que tuvimos al señor Rato -todo un economísta contrastado, ex del FMI, antiguo vicepresidente con el PP- al frente de aquel engendro. Pero no resultó. Las cuentas fallaron y dimitió antes de que le salpicase la mierda. Pusieron al frente a un hombre de nombre imposible, Goirigolzarri, una persona eminentísima en su campo, ex miembro del comité de dirección del BBVA, sí, ese que cobró la friolera de 56 milloncetes de euros por abandonar la entidad, para presidir el barco hundido de Bankia. Prometió profesinalidad y seriedad, pero por lo visto eso no está reñido con despedir a 6.000 trabajadores, engañar a miles de personas con las famosas preferentes, ni seguir desahuciando a parados o robar pisos a gente que prefiere suicidarse desde su balcón. Ese es nuestro querido banco. El banco que siempre hemos deseado todos los españoles. Porque para eso lo hemos rescatado tropecientas veces con nuestro dinero. Dinero que debería ser para nuestros hijos pero se lo damos al gobierno para que salve a ese banco que tanto se preocupa por nosotros, los que lo rescatamos...
Termino ya que me altero, porque no es para menos. Porque hoy mismo difundía el World Street Journal un demoledor artículo donde criticaba a la entidad y a la incompetencia de nuestros políticos -de todos los colores- que estando en su consejo de administración no hacen nada por evitar el desastre ya que no les dejan sus partidos meter mano en el asunto (ver noticia). Terminaba el artículo premonizando que mientras en España sigamos sin poner límites en la relación de nuestros políticos con la banca, nunca saldremos del gigantesco embrollo donde nos hemos metido.




[FUENTES: publico.es / online.wsj.com]

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